La primavera además de alterarnos la sangre nos deja hermosos paisajes coloridos repletos de flores, entre ellas encontramos la flor del «me quiere no me quiere» ¿Quien no ha le ha preguntado alguna vez a una margarita si es recíproco el amor que siente hacia una persona?
Hoy nos gustaría que reflexionásemos sobre esto, la margarita como asesora sentimental nos parece muy divertido y anecdótico pero…¿Por qué no preguntárselo directamente a esa persona? Quizás el miedo a no escuchar la respuesta deseada nos haga seguir arrancándoles los pétalos a las margaritas y seguro que además nos dará una respuesta concreta: sí o no. Pero en la vida las cosas nos son blancas o negras hay una gama de colores preciosos que no están esperando para que los vivamos, los sintamos y ante todo los disfrutemos. Por eso mismo agárrate a la vida: decide, siente, ama, pregunta, intenta, reintenta, sueña, actúa, explora nuevos caminos…En definitiva vive!
Dejemos que las margaritas decoren los paisajes con sus alegres colores mientras que nosotros nos llenamos de valor para preguntar: ¿Me quieres o no me quieres?
Nunca des por supuesto una respuesta porque «en verdad no puedes crecer y desarrollarte si sabes las respuestas antes que las preguntas» Wayne Dyer