Sabemos que el amor no es un sentimiento estático y que pasa por diversas fases:
- En un primer momento estamos “locamente enamorados” nos sentimos felices, con energía, optimistas y tenemos, en cierto modo, un “enganche” hacia nuestra pareja. Este estado tiene fecha de caducidad y es de agradecer, ya que nuestro cuerpo no soportaría durante toda la vida esta explosión de hormonas (feniltelitamina, norepinefrina, serotonina, etc.)
- Por regla general, como máximo, 18 meses después del flechazo de Cupido pasamos a la siguiente fase llamada de apego o de amor romántico, ahora son las endorfinas las protagonistas de esta segunda etapa del amor, y tenemos una sensación deserenidad y paz. Amamos, pero de otra manera, desde la calma y la tranquilidad.
Lo ideal es que si queremos seguir con nuestra pareja, ya que nos sentimos felices y plenos, alarguemos esta segunda fase, que sí puede durar en el tiempo. Las 3 claves para hacer esto y conservar el amor de pareja son:
- Reavivar la conexión emocional: habla con tu pareja, escúchala de forma activa, atiende y entiende qué es lo que está contando.
- Aumentar la conexión física: abraza, acaricia, mira…si son gestos que has perdido, vuelve a recuperarlos e inclúyelos en el día a día.
- Reíros: disfruta con tu pareja, ríete con ella, recordad alguna anécdota divertida o vivir alguna aventura juntos.
Si quieres conservar el amor en pareja recuerda que “el amor es como el fuego si no se alimenta se apaga.”