El regalo tiene un importante papel en el seno de una relación amorosa. Generalmente hacemos un regalo a nuestra pareja con motivo de fechas señaladas, como cumpleaños, Navidades, santos, aniversarios, un acontecimiento importante… pero a veces es simplemente porque nos apetece. Pues bien, cuando iniciamos una relación amorosa hemos de ser cautos regalando para evitar que nuestra pareja se sienta abrumada e incómoda, por tanto no le haremos un regalo cada día o regalos demasiado personales y los primeros regalos no serán de un alto coste, es preferible que al principio sean simples detalles, ya habrá tiempo para los regalos más caros cuando la relación esté más afianzada.
En cualquier caso, cuando hacemos un regalo a nuestra pareja, pensaremos en algo que le pueda hacer ilusión, teniendo en mente sus gustos, más que pensar en algo que «necesite» (esas cosas ya las anotaremos en la lista de la compra). Un regalo inadecuado puede ofender, desilusionar o hacer sentir incómoda a la persona que lo recibe.
Me ha invitado a su casa a cenar, ¿puedo llevar el vino o el postre? Las normas de protocolo social nos indican que cuando se nos invita a una casa a comer o cenar no debemos llevar ni comida ni bebida. De todas formas, cuando es nuestra pareja la que nos invita podemos quedar previamente con ella en que llevaremos una botella de vino o el postre.
Cuando regalamos flores es conveniente saber sus siginificado (existen algunas variaciones culturales), aunque hay personas que tienen una flor preferida y también exiten parejas para las que algunas flores tienen sus propios significados. Aquí un pequeño listado de los significados de algunas de las flores más populares para regalar:
- Rosa roja: Amor, pasión
- Rosa rosa: Agradecimiento, aprecio
- Orquídea: Belleza, dulzura, sentimientos sublimes
- Narciso y Muguete: Buena suerte
- Jazmín: Sensualidad
- Camelia roja: «Eres un encanto»
- Cactus: Fortaleza en las dificultades
Fuentes: Significado de las flores y El simbolismo de las flores.
Hay que saber regalar, pero también hay que saber recibir un regalo: un regalo siempre se agradece y no se pregunta su precio. El precio del regalo no se debe mencionar en ningún momento, pues el regalo es una forma que utilizamos para expresar nuestros sentimientos a la otra persona, donde el valor económico debe mantenerse al margen. Rechazar un regalo es una gran ofensa, por tanto es preciso explicar muy bien los motivos que nos llevan a no aceptar el presente (ej. Su excesivo valor, su desproporcionalidad…).
Hacer un regalo a otra persona es todo un ceremonial, en el que debemos cuidar determinados detalles, como retirar el precio y cuidar su presentación empaquetándolo en un bonito papel de regalo o caja y cuidando que el envoltorio no se deteriore antes de llegar a su destinatario así como elegir un lugar discreto, para que el momento de la entrega esté rodeada de espectación y emoción por parte de la persona que lo recibe, que inevitablemente nos contagiará y esa será nuestra mejor recompensa.
Autora: Galicia Protocolo
Ramón
agosto 9, 2011Me tranquiliza saber que no tengo que gastar mucho dinero en regalos!!!!!!!!!!!!!!!!!
Adriana
noviembre 23, 2011Creo que los detalles con la pareja son algo esencial en una relación, por eso quiero compartirte un regalo que le he hecho a mi novio en nuestro primer aniversario, que es algo original y puedes incluirlo en tus consejos, es una canción personalizada en la que le expresé todo lo que significa para mí tenerlo en mi vida y los mejores momentos que pasamos juntos este año, es un regalo especial que seguro hará sentir a tu pareja única. Gracias a http://cancionespararegalar.com/ por hacer de mi idea algo especial =)
Perico de los Palotes
diciembre 15, 2012Disculpe usted, pero llevar una botella de vino cuando se es invitado a comer o cenar a casa de alguien no sólo no está mal visto si no que es una costumbre casi obligada en muchos países, al menos en aquellos medianamente civilizados. Y aún es más, el protocolo dicta que el anfitrión no debe guardarse la botella de vino y debe abrirla antes, durante o después de la comida/cena, en función de si marida adecuadamente con la comida.
Más básico que eso el abecedario.